Carla Beatriz Soto, nos propone una serie de procedimientos y estrategias, para articular la palabra con el fin de evidenciar y politizar otras prioridades.

Por medio de estrategias y procedimientos, no solo llevará a cabo una obra artística gráfica, enfocada en tecnicismos de la disciplina. El núcleo fundacional del proyecto de Carla Soto, radica en un interés tan deslumbrante y liberador, como oscuro y doloroso, pero si algo deja en claro la autora, es que, este proyecto es necesario.

El proceso de trabajo comenzó con un registro híbrido de otras corporeidades, al mostrar diversas prioridades que no cumplen con la norma preestablecida, se comienza a generar un espacio de trabajo en donde lo preestablecido comienza a desaparecer, naturalizando aquello que la sociedad trata de borrar por medio de prejuicios y fobias.

Como gordo me siento profundamente interpelado en los escritos y en la obra, plasman por medio de la piel, el recorte, y la palabra, contar la historia de cada cuerpo, cada estría es como una frontera que al mostrarse, rompe con la barrera de la vergüenza que nos han impuesto por ser diferentes.

La obra abre una puerta mucho más grande de la que creímos, ya que este sistema de fobias, prejuicios y violencia hacia los cuerpos por ser diferentes, se aplican a cualquier persona que no cumpla con la norma impuesta por la sociedad, de ahí proviene la riqueza de este proyecto, en la visibilización de que la normalidad preestablecida es por medio de prejuicios y discriminación, que las corporalidades son mucho más amplias y que como un llamado a la unión de quienes no cumplimos con esas normas, la autora nos dice “Desobedece todo lo que digan de como tenes que ser, tu cuerpo es tuyo y merece tu amor”.

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